El exministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Álvaro Leyva Durán, envió una carta de cuatro páginas al presidente Gustavo Petro en la que manifestó una serie de preocupaciones profundas sobre la dirección actual del gobierno. En su misiva, Leyva expresó su inquietud por lo que considera un desvío de los principios que inicialmente inspiraron el proyecto político del mandatario, advirtiendo sobre la pérdida de rumbo y el riesgo de fracturas internas en la coalición de gobierno.
Uno de los puntos centrales de su carta fue la solicitud explícita al presidente Petro de que separe de sus cargos a dos figuras clave de su administración: Laura Sarabia, actual directora del Departamento Administrativo de la Presidencia, y Armando Benedetti, exembajador en Venezuela y figura influyente del Pacto Histórico. Según Leyva, la permanencia de estos funcionarios representa un obstáculo para la credibilidad del gobierno y ha generado tensiones tanto internas como externas.
Leyva también hizo referencia a episodios recientes que han causado controversia pública, sugiriendo que el manejo político y ético de algunas decisiones del Ejecutivo está deteriorando la confianza en el proyecto de transformación que Petro prometió durante su campaña. El exministro apeló a su trayectoria diplomática y su compromiso con la paz para justificar su intervención, afirmando que su intención es preservar el legado y el potencial del actual gobierno, no atacarlo.
Aunque la carta no ha sido publicada en su totalidad, fuentes cercanas al exministro confirmaron su contenido y tono crítico. La comunicación de Leyva se produce en un contexto de creciente polarización política y tensiones dentro del gobierno, lo que refuerza la percepción de que incluso figuras cercanas al presidente comienzan a distanciarse de algunas decisiones de su administración.
