“Antes no existían descargues ni compuertas en Caño Grande. Nuestro personal operativo ponía en riesgo su integridad al aplicar los químicos necesarios para garantizar el suministro. Hoy la realidad es distinta: contamos con condiciones seguras para los trabajadores y un servicio de acueducto mucho más estable para la comunidad”, dijo Chavarro.
El equipo técnico de la EAAV también presentó las proyecciones de nuevas obras enfocadas en optimizar aún más la operación de la PTAP, con el objetivo de garantizar un suministro eficiente y sostenido en esta zona de la ciudad, históricamente afectada por deficiencias en el servicio.
Los presidentes de juntas de acción comunal y ediles de esta comuna coincidieron en resaltar el cambio positivo que ha experimentado el sector. Señalaron que el servicio ha mejorado notablemente y reconocieron la presencia constante del equipo técnico de la EAAV, dispuesto a atenderoportunamente cada requerimiento.
Con este tipo de espacios, la EAAV fortalece su vínculo con las comunidades y promueve la transparencia en la gestión, permitiendo así consolidar una relación directa y participativa en torno al bienestar colectivo.
