El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha designado a Laura Sarabia como nueva ministra de Relaciones Exteriores, en sustitución de Luis Gilberto Murillo, quien podría aspirar a la presidencia. Sarabia, quien hasta ahora se desempeñaba como directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), es una figura de gran confianza para Petro y ha jugado un papel clave en su administración.
Su nombramiento representa un giro estratégico en la política exterior del país, con un enfoque más alineado hacia Estados Unidos y una postura crítica hacia el gobierno venezolano. Aunque Sarabia ha enfrentado cuestionamientos en el pasado, su lealtad al presidente ha sido determinante para su ascenso dentro del Ejecutivo.
El cargo que deja Sarabia en el Dapre será ocupado por Jorge Rojas, actual vicecanciller y defensor de derechos humanos, quien ahora tendrá la responsabilidad de coordinar las estrategias presidenciales desde la Casa de Nariño.
Estos cambios se suman a otros recientes en el gobierno de Petro, como la designación de Gregorio Eljach como nuevo procurador general de la Nación, en reemplazo de Margarita Cabello. Con esta decisión, el presidente busca consolidar su influencia en las instituciones de control y reforzar su equipo para los desafíos en materia de seguridad, migración y paz.
Las recientes modificaciones en el gabinete reflejan la intención del mandatario de fortalecer su círculo de confianza y prepararse para la última etapa de su mandato, en medio de un escenario político complejo.
