Los incendios forestales que azotan Los Ángeles han generado un fuerte debate en torno a la celebración de los Óscar 2025. Stephen King, autor de renombre, lideró la controversia al pedir la cancelación del evento, calificándolo de “inapropiado” ante la devastación que enfrenta la ciudad. King propuso que la industria debería enfocar sus recursos y atención en ayudar a los afectados en lugar de realizar una gala de lujo.
La Academia ha tomado algunas medidas, como posponer el anuncio de las nominaciones y cancelar el almuerzo de candidatos, además de donar fondos para los damnificados. Sin embargo, mantiene la postura de que la ceremonia debe realizarse, argumentando que es una oportunidad para resaltar los desafíos actuales y apoyar a la comunidad del cine.
Mientras tanto, otros artistas proponen alternativas. Algunos sugieren transformar los Óscar en un telemaratón benéfico, mientras que otros piden redirigir las ganancias televisivas hacia los afectados. La polémica pone en tensión el equilibrio entre entretenimiento y responsabilidad social en tiempos de crisis.
