La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, rompió el silencio respecto a los recientes audios del excanciller Álvaro Leyva, en los cuales este hace referencia a un supuesto plan para destituir al presidente Gustavo Petro. En una entrevista con la emisora W Radio, Márquez calificó de “muy doloroso” el contenido de los audios y expresó su molestia por la manera en que se le mencionó. Afirmó que, sin tener pruebas ni fundamentos, fue tachada de “traidora” por parte de sectores políticos y sociales que inmediatamente comenzaron a especular sobre su lealtad al Gobierno.
Márquez subrayó que nunca ha hecho parte de ningún plan para derrocar al presidente, y recordó que ha sido una aliada constante del proyecto de cambio que representa Petro. Aseguró que su compromiso con el gobierno es firme y rechazó las insinuaciones que buscan dividir al Ejecutivo o sembrar desconfianza entre sus miembros. En sus declaraciones, también manifestó su preocupación por la forma en que se está manipulando la información para generar crisis institucionales y dijo que este tipo de situaciones ponen en riesgo la estabilidad democrática del país.
Por otro lado, insistió en que las declaraciones de Leyva deben ser investigadas con profundidad, pero que no se puede permitir que la conversación pública se base en especulaciones o calumnias. La vicepresidenta pidió respeto por su papel como figura del Gobierno y exigió que se dejen de lado los señalamientos infundados que, según ella, solo buscan deslegitimar su imagen y la del proyecto político que representa.
La controversia gira en torno a los audios filtrados de Álvaro Leyva, donde el exfuncionario habla de posibles conspiraciones dentro y fuera del Gobierno. La mención indirecta de Márquez en ese contexto ha encendido el debate político y ha generado una ola de comentarios, sobre todo por parte de sectores de oposición.
