Petro intensifica su confrontación con los conservadores y acusa a su cúpula de bloquear reformas

El presidente Gustavo Petro ha intensificado su enfrentamiento con el Partido Conservador, luego de que su dirigencia lo acusara de poner en riesgo la democracia y de presionar a legisladores que no respaldan sus proyectos. En particular, Petro respondió a las críticas de la presidenta de esa colectividad, Nadia Blel, y del presidente del Congreso, Efraín Cepeda, quienes han cuestionado el manejo político del Gobierno.
El conflicto se desató tras el hundimiento de dos iniciativas clave para el Ejecutivo: la reforma laboral y la ley de financiamiento. Desde el Partido Conservador han señalado que la falta de consensos y la actitud del Gobierno han generado una ruptura en las relaciones con el Congreso. Petro, por su parte, ha acusado a los conservadores de actuar en contra de los intereses del país y de bloquear reformas necesarias para la transformación social.
Este choque agrava la crisis en la relación entre el Ejecutivo y los sectores tradicionales del Congreso, lo que podría afectar la gobernabilidad y la capacidad del Gobierno para impulsar sus reformas. La fractura con el Partido Conservador refleja un reacomodamiento de fuerzas políticas y deja en evidencia las dificultades del presidente Petro para consolidar una coalición estable.
Además, la disputa adquiere un tono más personal, con Petro lanzando críticas directas a los líderes conservadores. Esto podría llevar a una radicalización del debate político en el Legislativo, donde la oposición ya ha mostrado una postura más confrontacional frente a las iniciativas del Gobierno.
El escenario plantea desafíos para el Ejecutivo, que deberá replantear su estrategia de diálogo con los partidos tradicionales si quiere avanzar en su agenda legislativa sin quedar completamente aislado en el Congreso.